El secretario de Energía, Eduardo Rodríguez Chirillo, anticipó que es posible que las tarifas eléctricas vuelvan a aumentar en octubre y advirtió que los aumentos que tuvieron las boletas a lo largo del año no son suficientes para que las empresas realicen tareas de inversión para mejorar la infraestructura de las redes. Asimismo, ratificó que habrá cortes planificados durante el verano para enfrentar la sobrecarga del sistema, aunque aclaró que en principio no está previsto que afecte a usuarios residenciales.
El Gobierno no está dispuesto a aflojar con la eliminación de los subsidios en las tarifas de los servicios públicos, como modo de preservar el resultado fiscal, incluso a pesar de profundizar el deterioro del bolsillo, que impacta en el consumo y la actividad. De hecho, el proyecto de ley de Presupuesto presentado por el presidente Javier Milei prevé que casi el 85 por ciento del costo mayorista del sistema eléctrico sea cubierto por la tarifa que abonan los usuarios. Actualmente, ese valor ronda el 65 por ciento.
De acuerdo a los números oficiales, los subsidios a la categoría “Energía, Combustibles y Minería” pasarán de 6.741.332 millones de pesos en 2024 a 5.040.403 millones en el 2025. Esto representa una caída nominal del 25,2 por ciento. Si se contempla la inflación proyectada, la baja en términos reales sería del 41,3 por ciento.
A pesar de que en los últimos meses los valores de las boletas de gas y de luz se multiplicaron en relación al año pasado –se calcula que el incremento es del 600 por ciento– los aumentos no van a frenar. La intención es que ahora al menos siga el curso de la inflación general de la economía. Por ello, consultado sobre un aumento de tarifas eléctricas en octubre, Chirillo dijo que “de haberlo no sería más allá de la inflación».
Como para que no queden dudas de que lo que viene en materia tarifaria es más de lo mismo, agregó que «los aumentos que se produjeron en lo que va del año alcanzan sólo para cubrir el mantenimiento del sistema» y que «no queda margen para las inversiones que se deben realizar».
Cortes
Incluso en medio de un escenario tarifario explosivo, con fuertes reclamos de usuarios y de asociaciones de consumidores, los tradicionales cortes de luz en el verano van a continuar. Así lo adelantó el propio gobierno nacional en los últimos días. La magnitud de las interrupciones definirá el humor social en relación a la gestión oficial.
Primero lo mencionó el jefe de Gabinete, Guillermo Francos: “Se está analizando una programación de cortes. Si viene un verano de mucha temperatura, puede haber una demanda muy alta de electricidad. Lamentablemente, no ha habido inversiones, va a faltar generación y vamos a tener que programar algún corte, sobre todo, hacer algunos acuerdos con los sectores industriales”, indicó el funcionario. Francos justificó que “es una situación que viene de años y que hay que encarar seriamente. Hay que encarar inversiones y eventualidades, no podemos estar sujetos a improvisar”.
Por su parte, Rodríguez Chirillo aclaró que “no va a haber cortes programados a residenciales. Ni se está pensando, ni creemos que va a ocurrir en absoluto. Los cortes serían a empresas y en acuerdos voluntarios”. El Secretario agregó que “se le ofrece a la demanda que voluntariamente quiera reducir su capacidad de contratación de potencia y con eso alivianar la red un beneficio. Una empresa grande que desde ahora se le avisa y que en diciembre, enero, febrero, no produce tanto, puede anunciar que baja la carga pedida al sistema y se le ofrece una rebaja en el precio. Todo voluntariamente”.
Rodríguez Chirillo admitió además que los problemas podrían extenderse al verano de 2026, dado que entre otras cosas, la parada de planta de Atucha I demandará 30 meses. El funcionario viajó en la tarde del martes a Brasil para negociar la provisión eléctrica que se adquiere del país vecino durante el verano y también se negocia con Paraguay por el volumen de energía que Argentina toma desde Yacyretá, que habitualmente es por encima del 50 por ciento.
Para el secretario coordinador de Energía y Minería, Daniel González, “va a ser un verano complicado”. “Se está trabajando en medidas de mitigación. Va a ser difícil dependiendo de las temperaturas y de la situación hídrica. Estas soluciones deben ser del mercado, por lo que las soluciones de fondo van a tomar tiempo”, advirtió.