A un día del duelo entre River y Boca por los cuartos de final de la Copa de la Liga, el césped del Mario Kempes no se encuentra en buen estado y hay preocupación. Clarín tuvo acceso al campo de juego y pudo observar en primera persona que el césped y el piso donde se disputará el Superclásico está lejos de su mejor versión.
A pesar de los esfuerzos realizados para acelerar los trabajos de resembrado que se venían realizando, a simple vista no se observa un verde claro, sino que hay bastante arena, algunas grietas y se trabaja contrareloj con el marcado del cuadrículado. Y todavía no está bien verde como manifestó Agustín Calleri, presidente de la Agencia Córdoba Deportes en la conferencia de prensa que se realizó el viernes al mediodía en Ezeiza para la presentación del partido con la presencia de jugadores (Nacho Fernández y Marcos Rojo) y dirigentes (Juan Román Riquelme e Ignacio Villarroel) de ambos clubes y el titular de la AFA, Claudio Tapia, para presentar el partido.
«El River-Boca es el Superclásico más importante del mundo. En Córdoba se vive con mucha más pasión porque no estamos acostumbrados a tenerlo. Y a todos les digo que se queden tranquilo porque el campo de juego está en óptimas condiciones. Nos vienen dando un poquito por ese tema, pero va a estar bien. Va a estar verde y lindo«, afirmó Calleri en el predio de la AFA en Ezeiza.
Vista aérea del campo de juego del Kempes, este sábado. (Fernando De la Orden)Desde Córdoba eran optimistas. «Vamos a llegar muy bien, estamos en plena resiembra, es la época, y lo vas a ver en todas las canchas esto. Es un proceso que dura tres o cuatro días con algunos defectos, pero es un proceso natural que se hace todos los años», había afirmado con mucha confianza Marcos Ibáñez, ingeniero agrónomo y encargado del campo de juego del Kempes.
«La resiembra es algo habitual. Cuando termina un partido de local se hace esta resiembra, son los tiempos normales. El jueves pasado se jugó acá y estamos en el quinto día de resiembra, en 48 horas van a ver una imagen completamente diferente, y el domingo va a estar perfecta», amplió el especialista.
«En la previa del invierno se hace una intervención muy fuerte sobre el césped de verano, para que el césped de invierno tenga espacio donde crecer. Se corta abajo, se hace corte vertical, se le tira arena para ayudar a la germinación, todo eso afea a la superficie y es lo que se ve hoy. Con el correr de las horas, que explotan las semillas, paulatinamente irá mejorando lo que se ve, la parte estética. La parte de jugabilidad ya te lo da la base, y está muy bien», explicó Ibáñez.
La imagen del campo de juego del Kempes, a horas del Superclásico del domingo. (Fernando De la Orden)En Córdoba no habían tenido con antelación la confirmación de partidos para el fin de semana, aunque se barajaba la posibilidad que River jugara en el Kempes, sea cual fuere el rival. Sin embargo, el proceso de resiembra se demoró un par de días y comenzó recién el jueves pasado porque no estaba claro si en la última fecha Instituto recibiría al Millonario en ese estadio, partido que se terminó jugando en Alta Córdoba. Cuando quedó confirmado el Superclásico, todos los caminos apuntaron a La Docta, claro.
«Nuestra cancha está habitualmente a 8 puntos, es un margen que damos porque siempre necesitamos mejorar. Vamos a llegar muy bien al domingo. El clima es el único factor que no podemos manejar pero se viene dando perfecto. Comenzamos el jueves, la lluvia permitió que las semillas germinaran y ahora tenemos sol pleno«, celebró Ibáñez.
De todos modos, la vista y las imágenes del Kempes por ahora marcan lo contrario. ¿Podrá llegar a verse en buen estado este domingo a las 15.30 cuando los equipos salgan a la cancha?