Gimnasia hizo de todo, pero no pudo con Godoy Cruz en el bosque platense. El dueño de casa tuvo la pelota, construyó las situaciones pero no encontró la llave para encontrar el gol. La diferencia fue del equipo mendocino, más oportuno y práctico sin la pelota.
Después de un primer tiempo con muchas intenciones pero sin goles, Godoy Cruz logró abrir el marcador a los cinco minutos del reinicio. Fue un anticipo de Salomón Rodríguez a un centro que sacó desde la izquierda Santino Andino, ayudado por una salida en falso del arquero Marcos Ledesma.
El Lobo no pudo acomodarse mejor en el lote de los equipos que pelean en el tramo final del torneo. Con los tres puntos que se lleva a Mendoza, el Tomba se muestra en la anual cerca de las posiciones que otorgan una plaza en la Libertadores.
Gimnasia tuvo la pelota, acumuló situaciones, sin éxito. La más clara en el segundo cuando Franco Petroli le sacó dos tiros en la misma jugada a Rodrigo Castillo: primero el cabezazo y después un remate a quemarropa en el rebote.
Cerca del final hubo suspenso. En la revisión para determinar un penal en favor de Godoy Cruz, el árbitro Sebastián Zunino advirtió una falta previa a esa acción y terminó sancionando un tiro libre que dejó al Lobo con vida para intentar, en principio, el empate.
Sin embargo, lo que no le salió en todo el encuentro, tampoco en el tramo final. Con la impaciencia de los espectadores por caer luego de tres empates consecutivos que lo postergaron de la discusión seria por el título, Gimnasia dejó el campo con una tenue silbatina que marca su presente.
Es que habían pasado ocho partidos de la última derrota y un nuevo triunfo no solo cortaba tres empates seguidos, sino que mejoraba la distancia entre los perseguidores del lider Vélez.
Con cuatro puntos de los 12 posibles, Godoy Cruz volvió a sumar de a tres luego de seis sin triunfos. La victoria lo pone nuevamente en la pelea por una plaza en la próxima Libertadores, el único objetivo que puede perseguir en lo que resta de la temporada.