Marcelo Gallardo ya llegó a Buenos Aire y se reúne con los dirigentes de River para sellar su regreso al club después de casi dos años. Así, el Muñeco se baja de la estatua y vuelve a la acción para intentar revitalizar al equipo de Núñez tras la salida de Martín Demichelis.
Minutos antes de las 10 de la mañana, Gallardo asomó por la puerta de arribos nacionales de Aeroparque. Lo esperaban una gran cantidad de periodistas, camarógrafos y fotógrafos. También, se acercó mucha gente al enterarse del la situación. Por es, la seguridad de Aeroparque tuvo que armar un pasillo y un corralito para organizar la salida.
El Muñeco estaba junto a su mujer, Geraldine La Rosa, y a su pequeño hijo Benjamín, de 5 años. Los tres volvían de Mendoza, donde pasaron el fin de semana y vieron el triunfo de Independiente Rivadavia sobre Independiente en el Bautista Gargantini. En el equipo mendocino está Nahuel Gallardo.
Abrigado, con buzo y campera, y unos lentes que le daban un toque intelectual, con una mochila en sus espaldas, Gallardo partió de la provincia cuyana a las ocho de la mañana. Adelantó su vuelo ya que en principio tenía pensado su regreso para mañana. Toda una señal de lo que se viene.
Al bajarse del avión y tomar sus pertenencias, Gallardo se dirigió a su domicilio con su familia y luego irá rumbo al encuentro con los dirigentes de River, quienes lo esperan para hablar del proyecto para su segundo ciclo en el club. También, se acordarán detalles, pautas de trabajo y la posibilidad de la llegada de refuerzos ya que el mercado de pases todavía está abierto.
Gallardo volverá con su mismo equipo de trabajo de siempre. Lo escoltarán sus ayudantes de campo Matías Biscay, Hernán Buján, los profes Pablo Dolce y César Zinelli y el analista de videos Nahuel Hidalgo. En tanto, podría sumarse como entrenador de arqueros Marcelo Barovero.